A partir del 17 de Abril se encontrará la muestra de acuarelas de Juan Marcos Solís, académico del Departamento de Comunicación visual , en la sala Marta Colvín del Campus Chillán.
Juan Marcos Solís es de Concepción, pero hace cinco años dejó la ciudad para irse a Chillán donde es docente de la escuela de Diseño Gráfico “desde del 2008 enseño representación gráfica digital” comenta. La decisión fue tomada en parte por la fuerte vocación que tiene este docente por la acuarela. “Necesitaba enfocarme más directamente con la pintura. Viajaba mucho de Concepción a Chillán, ida y vuelta, para hacer clases. Y necesitaba tiempo para poder darle mayor dedicación a la acuarela” aclara.
“Estudié arquitectura en la UBB, de ahí comenzé a trabajar en representación gráfica a mano alzada de lugares urbanos y en esa misma fecha complementé mis estudios con talleres de pintura que por ese entonces dirigieran los artistas pintores Víctor Paz por un lado y José Bustos” agrega.
Muestras y actividades
La primera exposición individual la realiza el año 2016 en la Galería Marina titulada “De Ilusión y Soledades”. Y el año pasado fue seleccionado para exponer en la 8°Bienal de Acuarela de Brioude, Francia, donde dicta un taller de retrato a la acuarela y realiza una demostración “in situ” del croquis urbano. “A partir de ese evento salió la oportunidad de poder hacer taller de acuarela en la escuela de arte y oficio en el norte de Francia. Fue un ofrecimiento formal por parte de los organizadores del encuentro y debería realizarlo el segundo semestre” cuenta Solís.
Por otro lado fue seleccionado para la convención de acuarelistas en “Fabriano in Acquarello”, en Fabriano, Italia. De esto comenta que “me sorprendió, una de mis obras fue escogida entre el trabajo de 20 artistas chilenos” y agrega “en Francia sucedió también que fui casi el único latinoamericano participando de la bienal”
En cuanto a la exposición que se realiza en Chillán, relata que nunca antes había expuesto en esa ciudad. Y que la muestra Los actos del comer reflexiona mediante la acuarela aquella acción que “cuando nos sentamos a comer no advertimos que en ese acto cotidiano se agazapa la historia entera de la humanidad. Cada detalle constituye una escena en la que convergen actitudes, sentires, posturas, gestos, rituales. Los actos del comer son mediados por objetos de gran significación cultural, una olla, un plato o una taza. Retratar estos objetos es referirse al predicado haciendo alusión al sujeto sin necesidad de nombrarlo. Ese sujeto es cada uno se nosotros en diferentes contextos culturales, tiempos y espacios arquitectónicos”.