El taller se llevó a cabo en un ambiente dinámico y colaborativo, permitiendo una aproximación de manera práctica a los principios básicos de la captura fotográfica. Mediante una exposición desarrollada en el laboratorio, pudieron familiarizarse con aspectos esenciales del lenguaje visual, comprendiendo la relevancia de la composición, el manejo de la luz y la intención comunicativa presente en cada imagen. Este enfoque facilitó la comprensión de los contenidos revisados en clases y abrió un espacio para resolver dudas y experimentar con mayor libertad.
Más allá de los elementos técnicos, la actividad destacó por su aporte formativo y humano. La metodología basada en el aprendizaje entre pares permitió que el estudiantado de primer año se sintiera acompañado en sus primeros pasos dentro de la carrera, fortaleciendo el sentido de comunidad. El apoyo de un estudiante de tercer año generó un puente natural entre distintos momentos del proceso académico, promoviendo el intercambio de experiencias y fomentando un ambiente de confianza, curiosidad y participación activa.
Actividades como este taller son parte de las iniciativas de la Escuela de Diseño Gráfico que no solo fortalecen competencias técnicas, sino que también promueven una visión integral del diseño, entendiendo la fotografía como una herramienta clave en la construcción visual.
